martes, 21 de enero de 2014

Olor a libros antiguos....

En una de esas caminatas por la calle, así como quien no quiere la cosa, una se topa con cada cosa curiosa... esta vez fue con una mini feria de libros usados. Y la curiosidad en mi pudo más, porque aunque no soy una ávida lectora, igual me sentí atraída por chequear algunos de esos libros de tapa oscura y desgastada.

Es sorprendente las cosas que uno puede tener guardados en su casa, y hasta que uno no las deja ver no sabe que pueden ser "el tesoro" de otros. Allí en esas mesas encontré todos las novelas que me pidieron en la secundaria y que ninguna librería tenía cuando las necesité. Estaban esas enciclopedias en tomos que te explican de todo y con fotos y resultan mucho mejor que el ya olvidado Escuela Nueva. También encontré un montón de libros y revistas de arte, cosas que me hubieran sido recontar útiles cuando estaba estudiando diseño y no me daba el tiempo para ir al Centro a buscar material. Habían todos esos coleccionables que vienen en El Comercio, estaban completos y guardados en bolsas listos para empastar. Estaba el infaltable recetario Nicolini, en todas sus ediciones. También habían libros para niños lindos y bien baratos, encontré unos de Plaza Sésamo nuevecitos. Una de las cosas que a mi me llaman más la atención son las revistas, y allí vi una colección impresionable de Selecciones y Caretas, con fotos y artículos que reflejaban como los tiempos han cambiado y cómo las portadas dejaron de ocuparlas importantes y alegres noticias para ser remplazadas por el ampay del día.





Un paseo chiquito pero que te deja esa sensación de nostalgia lindos recuerdos... las cosas que uno se encuentra por allí.


jueves, 9 de enero de 2014

Una vuelta por el mercado...

Y este es un post raro, porque la verdad no soy una asidua visitante del mercado ya que admito que me atolondra un poco no poder ubicar todo ordenado en estantes con sus precios y ver pollo muertos colgados por todos lados; la verdad es que si voy al mercado es a comprar frutas y a tomarme un rico jugo... eso si me gusta (plop).

Pero esta vez visité el famoso mercado de Minka que queda en el Callao, al cual ya había visitado hace uff de años cuando recién abrió, pero ahora... vaya "makeover" que se ha dado!!!
Es de lo más interesante y cómodo comprar, comenzando que como hay carritos para llevar las compras y se me hace mucho más feliz el recorrido ya que mis brazos flacos no aguantan el peso de las bolsas. Y cada sección está señalizada, así no se mezclan las carnes con las verduras, ni los abarrotes con las cosas de limpieza, ni nada. A parte eso me permite consultar todos los precios de un sólo rubro antes de comprar y después no lamentarme cuando voy a otro puesto y lo encuentro 2 soles menos de lo que pagué. Todo se a convertido en una ciudadela dónde encuentras el boulevar de restaurantes, el de tiendas de vestir, juguetes, etc... para qué, está bien bonito (y por siaca esto no es publicidad al distrito ni nada, porque barato-barato tampoco es...jajaja).
No pude entrar a todos los stands porque fue una visita rápida, y porque también me demoré comiendo un cebiche mixto en un puestito que el restaurante Sara Sara tiene dentro del stand de frutas, junto a dónde venden chifles y demás.... jeje, pero con lo poco que vi me fui feliz y con ganas de volver otro día de visita.







El que si no aguantó mucho la caminata fue mi hijo, pero el carrito le sirvió a él también...jajaja!!!