El me oye...

Les cuento que el fin de semana a mi esposo le tocó dar un tema en la reu de jóvenes de la iglesia, y aunque el tema pueda ser muy conocido es también muy cierto...y es que Dios escucha las oraciones!
No saben cuántas, pero cuántas veces he podido comprobar esto... y es que estoy convencida que por más que mi oración sea chiquita y sencilla es igual de importante a esas oraciones llenas de palabras rimbombantes y complicadas hechas por gente muy religiosa. Y es que es simple, orar es conversar con Dios! ...y lo mejor es que uno no tiene que esperar que El termine de ver el partido, o que llegue el fin de semana, o que haga un huequito en su agenda para que te escuche (menos mal, porque yo cuando quiero hablar soy bien impaciente...jaja!).

"Me buscaréis y me hallaréis, porque me buscaréis de todo vuestro corazón" (Jeremías 29:13)

Y a los que se preguntan: "...¿y La Bechi cómo está segura que Dios existe?"

- Fácil...Hoy hablé con El!!!

La Bechi