lunes, 15 de diciembre de 2014

Wi-wi-shu-a-merri-crismassssss...

Con niños en casa, la navidad se convierte en todo un evento... y es que - ¡¡¡mamá!!!, cómo no vamos a decorar si en mi colegio ya está todo decorado?!!! - dijo el niño y a sacar los adornos se ha dicho.

La verdad no somos de los que se afanan un montón con la decoración navideña, pero si nos gusta tener la casa acorde a la celebración. Así que ni bien comenzó diciembre empezamos a desempolvar el arbolito, los adornos, poner el mantel navideños, sacar las luces para el balcón y demás.

La novedad es que este año construimos nuestro propio Calendario de Adviento, que en cierta forma fue un truco para que nuestro hijo aprenda a esperar con paciencia el día de Navidad sin estar preguntando a cada rato por los regalos con toda esa ansiedad que le generan los comerciales. Así hicimos los 24 sobres y en cada día pusimos un versículo bíblico acerca de Jesús + un dulce, para ir abriéndolo día a día y recordar que la navidad tiene un significado mucho más importante. ¿Si funciona?, la verdad no tanto como quisiera, ya que ni bien lo colgamos mi hijo se quiso comer todos los dulces, pero luego entendió mejor el concepto y está aprendiendo a tener paciencia.


































Aunque toda esta tarea de armar y desarmar sea un poco pesada, la estamos disfrutando mucho más ahora que vemos a nuestro "pequeño ayudante" pasear por la casa todo emocionado.


3 comentarios:

  1. Que agradable es decorar la casa con los hijos y cuando estan pequeños mucho más. Yo tambien quiero un dulce. Besos de tu madre

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    1. Siiii, es una emoción diferente y linda cuando hay niños... ahora lo sé.
      Besos también!!!

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  2. Que agradable es decorar la casa con los hijos y cuando estan pequeños mucho más. Yo tambien quiero un dulce. Besos de tu madre

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